Bienvenidos de nuevo a nuestra huerta caracol. Como todas/os sabréis una de las características más notables de la primavera es la gran explosión de vida que se produce en el mundo natural. Muchos animales despiertan de su letargo invernal y muchas plantas brotan y florecen. Todo ello otorga una serie de características a la huerta de primavera que hacen que tengamos que intensificar el trabajo en ella con respecto a la actividad más relajada del invierno.
En primer lugar, destacaremos la especial atención que hay que brindar a la aparición de plagas en nuestro huerto. En agricultura ecológica se trabaja desde la previsión preferentemente, es decir, aplicamos las medidas para evitar las plagas antes de que se produzcan, siempre que sea posible, ya que luchar contra una plaga ya establecida es bastante intrincado y nos pueden echar a perder la cosecha que tanto esfuerzo nos costó sacar adelante.
Algunas de las medidas más comunes para la prevención de plagas ya las mencionamos en la huerta de invierno, como son las asociaciones y las rotaciones. Durante la primavera solemos usar otras medidas preventivas complementarias:
–Purines: Son concentrados conseguidos a partir de la fermentación de distintos productos. El procedimiento consiste en dejar en agua durante dos semanas aquello de lo que queramos obtener el purín. Un ejemplo es el purín de ortiga que, entre sus múltiples propiedades está la de actuar como fertilizante, bioestimulante, repelente de pulgones, mosca blanca y araña roja. Otro purín preventivo de hongos, pulgones y ácaros es el purín de ajo y cebolla.
–Decocciones: Se obtienen macerando la planta durante 24 horas en agua e hirviendo la mezcla durante 20 minutos. Como ejemplos tenemos la decocciones de cola de caballo que previene a las hortalizas de todo tipo de hongos, y la decocción de tanaceto y ajenjo que previene de pulgones y hormigas.

Cola de caballo ( Fuente: https://buff.ly/2EItjzq)
Aún habiendo aplicado estas medidas, hay ocasiones en las que se nos materializa una plaga en nuestra huerta y debemos luchar contra ella. En estos casos usamos remedios curativos como:
–Extracto de Neem: Es un aceite extraído de un árbol de la india llamado árbol del Neem (Nim). Además de un montón de propiedades medicinales, actúa de repelente de pulgones, orugas e insecticida en general. Se utiliza diluido en agua.

Árbol del Neem (Fuente: http://www.neemherbalproducts.com/neem.php)
–Jabón de potasa: Aplicando una dilución de este jabón en agua combatimos los pulgones y otros insectos succionadores.
–Azufre: Se usa principalmente pulverizado para luchar contra el hongo del oídio, pero se han de usar una serie de restricciones para que no resulte tóxico.
–Cobre: El oxicloruro de cobre se emplea como bactericida y fungicida contra el mildiu.
