Con la llegada de las altas temperaturas, todos los mamíferos (incluido el ser humano) tratan de adaptarse al calor para sufrirlo lo menos posible. Seguramente te hayas fijado que los perros, entre otros animales, jadean. Este comportamiento es típico tras una buena sesión de ejercicio físico pero también en días de mucho calor. Los perros no sudan como nosotros. Sólo pueden hacerlo a través de sus almohadillas, ya que tienen todo el cuerpo lleno de pelo. Aunque el jadeo puede significar otras cosas, en los momentos de calor el jadeo permite al animal refrigerarse al realizarse una pérdida de vapor de agua a través de la boca de la misma manera que lo hacemos nosotros cuando sudamos.
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La vasodilatación es otro de los mecanismos que utilizamos los mamíferos para perder temperatura corporal. Pero… ¿qué es la vasodilatación? Seguramente alguna calurosa tarde de verano o tras realizar un gran esfuerzo, tu cara se ha puesto colorada como un tomate. No nos referimos al característico color de tomar el sol, sino al color rojo del sofoco. Esto es debido a que los vasos sanguíneos de nuestra cara se ensanchan permitiendo que circule mas sangre por ellos. Una sangre que está a demasiada temperatura y necesita enfriarse y nuestra cara, una superficie corporal grande y al descubierto, se convierte en la mejor zona para que nos dé el aire y refresque la sangre.

Diferencia entre un vaso sanguíneo constringido y otro dilatado. Al dilatarse aumenta el flujo sanguíneo al tener un mayor diámetro.
Otros animales, como por ejemplo el elefante o la liebre, lo que tienen son una orejas muy grandes. A través de la vasodilatación, en los momentos de mucho calor, las orejas son recorridas por cantidades más grandes de sangre y, al moverlas o mojárselas, la sangre se enfría y se mantiene la temperatura corporal.

Elefante africano en la sabana. Fuente: Pixabay.com
Si tienes una mascota mamífera en casa (por ejemplo un gato) igual has podido observar alguna vez que, con la llegada del buen tiempo, empiezan a perder mucho pelo. Eso es debido a que el pelo del animal está cambiando. Durante el invierno, al ser una época mas fría, el pelo de muchos mamíferos es más tupido que en verano y con la llegada de temperaturas más altas este se cae. Se debe a que una capa de pelo más densa protege más del frío pero da calor en verano. La solución es un cambio en el pelaje según la época del año.

Gato doméstico acicalándose. Fuente: Pixabay.com
Ahora que ya conoces muchos de los mecanismos que utilizan los mamíferos para sobre llevar mejor el verano es hora de observar estos comportamientos ya sea con tu mascota en casa o con los mamíferos del Parque Regional del Sureste en la naturaleza.