Una de las aves más comunes en los ecosistemas de laguna es el avetorillo común. Esta ave presenta un marcado dimorfismo sexual. El macho adulto del avetorillo común tiene la parte superior de la cabeza y el dorso del cuerpo de color negro verdoso brillante, que contrasta con el cuello pardo ocráceo claro y la gran mancha pardo amarillenta o rosada de las alas. Mientras que la hembra tiene sus partes superiores de color marrón y sus manchas alares apenas son visibles. La parte superior de la cabeza también es muy oscura y todo su plumaje tiene tonos ocráceos con dibujo estriado.
Ambos sexos tienen los ojos amarillos y el pico es alargado y del mismo color con la base rojiza durante la reproducción. Las patas y pies son verdes o pardo verdosos. Los jóvenes del año tienen un plumaje muy parecido a las hembras. El avetorillo posee costumbres discretas y esquivas. Cuando está en posición de alarma adelgaza su cuerpo y se estira, levantando el pico en una línea vertical perfecta con el cuello también rígido y estirado, de forma que queda casi tan fino como los carrizos entre los que se oculta. Su alimentación es fundamentalmente insectívora aunque a veces pesca pequeños peces también, y caza pequeños mamíferos, ranas, lagartos y tritones.
Esta especie no es gregaria, aunque no es raro verlos en pequeños grupos. El avetorillo es de costumbres crepusculares, aunque en época de cría es posible verle activo en mitad del día. El macho de avetorillo suele construir varios nidos a medio hacer, después la hembra escoge uno de su agrado y lo completan juntos. Normalmente se trata de una ligera estructura que contiene juncos secos, raíces y tallos de carrizos forrado con hierba seca y hojas. A veces esta estructura está sujeta a los tallos bajos de los carrizos u otras plantas y su altura es variable en función de la marea de las aguas donde esté posicionado, en aras de salvaguardar el nido de inundaciones. Esta ave suele criar a finales del mes de mayo. A la semana de vida ya salen del nido y suben hasta la cima de los carrizos con la agilidad de pequeños ratones. Del mismo modo que ambos adultos se alternaban en la incubación, simultanean también la alimentación de los jóvenes.
La voz del avetorillo en las noches primaverales es bien conocida por todo el mundo, pero no todas las personas la identifican como perteneciente a un pájaro. Probablemente una escasa minoría sabe que un croar bajo y ronco que podríamos expresar como «¡¡joug!!» y que repite incansablemente desde el anochecer a intervalos de 2 ó 3 segundos, es la voz de un macho de avetorillo común.
De manera general, si quieres ir en busca de este pequeño ser en España tendrás que hacerlo entre abril y septiembre, ya que después migran a África. Sin embargo llevamos unos años viéndole en los alrededores de nuestra laguna durante todo el año.

Distribución del avetorillo. Fuente: https://www.seo.org/ave/avetorillo-comun/
Fuentes:
http://www.pajaricos.es/a/a1/mas/avetorillocomun.htm
Con las Aves por la Comunidad de Madrid. Javier Rico. Consejería de Medio Ambiente y ordenación del territorio. Comunidad de Madrid. SEO/BirdLife www.seo.org
Aves de España. Eduardo de Juana. Juan M. Varela. SEO/BirdLife
