La vegetación del Parque contiene una elevada diversidad de especies (algunas endémicas de la Comunidad de Madrid). Se considera singular y rara, y muy contrastada entre las áreas más elevadas y el fondo del valle bajo del Jarama. Así en las áreas de cortados y cuestas -con dominio de yesos en sus suelos- existe una flora muy especializada en estas litologías, formada exclusivamente por matorrales. En general, son especies adaptadas a la escasez de agua y elevadas temperaturas estivales.
Una de las especies más destacadas por sus usos ligados a actividades humanas es el “Esparto” o “Atocha” (Stipa tenacissima L.) Esta especie forma comunidades denominadas espartales o atochales, donde es la especie dominante. Es una gramínea perenne con forma de mata, compuesta por un conjunto de macollas de crecimiento radial.
Adquiere porte de matorral cuyos tallos floridos (a modo de espiga) pueden alcanzar los 1,5 m de altura sobresaliendo del resto de sus hojas. Sus hojas son estrechas parecidas a juncos y muy numerosas formando cepellones o macollas. Frecuente en terrenos secos y pobres de sustrato arenoso. Florece de marzo a junio. No presenta grado de amenaza. La forma de la hoja es el resultado de la adaptación que ha desarrollado para evitar la pérdida de agua, al enrollarse sobre su envés, minimizando así la transpiración.
Usos del esparto
Ya desde la época romana, el ser humano ya desde la ha utilizado la fibra de esparto para la fabricación de pasta de papel, cuerdas y los más variados utensilios (que incluyen, entre otros, zapatos, cestas, redes de pesca, costales, espuertas y capachos para el prensado de la uva y la aceituna).

El momento adecuado para su recogida es en los meses centrales del verano, la fórmula más cómoda es reunir un grupo de atochas en un ramo y usar este mismo ramo para tirar del siguiente hasta formar haces para su posterior transporte, se deja secar a menos que se vaya a usar en verde, en cuyo caso se procede a tejer y se cura en la propia pieza una vez hecha. Su trabajo tradicionalmente se ha dividido según si el esparto se usaba verde o dejándolo macerar y según si se picaba con mazo o no. Cuando el esparto se seca se puede guardar para trabajar en otro momento, aunque para poder volverlo a trabajar ha de ser remojado al menos 48 h para que permita que vuelva a estar flexible, o bien se sumerge en agua algo más de un mes para proceder a picarlo y tener la textura apropiada para otro tipo de trabajos
El esparto se ha destinado a la cestería, el calzado y múltiples usos ya que es muy flexible permite su trabajo de manera relativamente sencilla ya sea reuniéndolo en soguillas o bien en pleita para su posterior trabajo. La pleita es el esparto que se junta para formar una tira ancha trenzada en grupos de mínimo tres, a mayor ancho mayor número de haces de esparto para hacer la pleita, para luego ser tejida unida en una cesta o ser usada por ejemplo como cincha para formar el queso. Labor para la que era muy adecuada por mantener la forma y dejar salir el suero a ello debemos la forma de algunos quesos y su textura en la corteza, aunque hoy esta en muchos casos se reproduce con moldes de plástico. La soguilla de esparto se ha usado mucho para las alpargatas cuya suela se formaba de esparto haciendo una espiral con la cuerda y luego cosiéndola para que no se soltara, posteriormente se le añadía la tela para formar el calzado.
Las piezas de esparto características han sido muchas y muy variadas a lo largo de la tradición, desde las esparteñas o alpargatas a canastos, queseras, meloneros (para colgar los melones) fundas de botellas o garrafas para mejor mantener la temperatura o características de lo que en ellos se guardaba, soplillos para avivar la lumbre y otra multitud de elementos ya olvidados casi como los serones para cargar mercancía en los burros o los tizneros para apoyar las ollas recién salidas del fuego (precisamente se llaman tizneros porque quedaban manchados de hollín).
Aún podemos encontrar en Madrid (que es lo que mejor conocemos, seguramente esto se repita en otras zonas de España) algunas tiendas en que comprar productos de esparto como la Espartería de Juan Sánchez, la conocida Alpargatería Casa Herránz en la Calle Toledo y un Taller en Valdemanco que realiza cursos para el trabajo del esparto y otras labores tradicionales.
Fuentes:
http://www.artesaniaiberica.es
El Parque Regional del Sureste. Comunidad de Madrid. ISBN: 84-451-1605-3
Ecosistemas: Revista cientifica y técnica ecologia y medio ambiente num: 2007_1


