Entre la vegetación que está presente en el Parque Regional del Sureste podemos encontrar el gordolobo, también conocido popularmente como, verbasco, candelaria, hierba de paño, friegaplatos, matapeces u orejas de lobo.

Originaria de Asia y Europa y distribuida por los romanos, se encuentra creciendo ampliamente por Europa, incluyendo la Península Ibérica. La podemos hallar en multitud de suelos aunque es fácil verla en terraplenes, barbechos, suelos pedregosos, baldíos, bosques y praderas. Esta especie vegetal prefiere suelos bien drenados y amplia exposición al sol.
Es una planta de crecimiento bianual. En su primer año forma una roseta basal, y en su segundo año la planta desarrolla su tallo erecto, florece entre junio y septiembre y forma una inflorescencia de flores amarillas. La polinización se realiza por insectos y es una planta melífera.
Tiene las hojas alternas y simples, con el borde ligeramente dentado. Esta alternancia de las hojas permite que las superiores recojan el agua canalizándola hacia las inferiores y dirigiendo el agua a las raíces.
El término Verbascum proviene del latín Barbascum que significa barba, haciendo alusión a la pilosidad de sus hojas. y es que toda la planta está recubierta por una capa pilosa que le ayuda a retener agua y a defenderse de los depredadores.

Debido a la presencia de múltiples principios activos, esta planta es utilizada medicinalmente desde la antigüedad: Es expectorante, sirve para tratar asma y bronquitis; Sirve de tónico exterior para las afecciones de la piel; Combate las lombrices, afecciones bucales, estreñimiento, dolores y hemorroides. Además, de sus nombres vernáculos (mencionados en el primer párrafo de esta entrada) podemos inferir algunos de sus usos tradicionales. También se han usado, las hojas del gordolobo, como aislante térmico en la suela de los zapatos y debido a su pilosidad, históricamente, se le conoce como papel higiénico silvestre.
En la antigüedad, las mujeres lo empleaban en cosmética porque sus flores producen un pigmento que proporciona reflejos dorados al cabello. Los romanos utilizaban los principios activos de la planta para pescar, ya que producía una ligera intoxicación en los peces que hacían que fueran más fáciles de atrapar. Sus hojas y tallos untados con cera o aceite se utilizaban como mechas o antorchas. En la edad media se pensaba que tenia propiedades mágicas (se creía capaz de repeler encantamientos) y los magos usaban sus tallos encendidos para realizar magia.
En el Parque Regional del Sureste es fácil de observar pero ahora que ya la conoces seguro que recuerdas haberla visto en muchos más lugares. No olvides respetarla y no destruirla.
Fuentes:

