Arquitectos del Sureste: Pico picapinos (Dendrocopos major)

Hoy le toca el turno a otro de los pájaros carpinteros más habituales en el Parque Regional del Sureste, el pico picapinos (Dendrocopos major). De tamaño más pequeño que el pito real y coloración blanquinegra, más característica de los picos. Presentan dimorfismo sexual, siendo la parte de la nuca roja en los machos y negra en las hembras. Los jóvenes tienen el píleo rojo, las partes ventrales de color blanco sucio y menor intensidad de rojo en la zona anal.

Los tamborileos son especialmente característicos en el pico picapinos que realizan al alimentarse o al taladrar la madera. Sin embargo, cuando los golpes son muy rápidos y consecutivos son un reclamo para marcar el territorio y para atraer la atención de las hembras.

Suelen emparejarse y criar cada temporada en el mismo lugar, incluso en el mismo tronco, siempre que no haya sido ocupado por otras especies como un estornino o pequeños mamíferos con su familia. La construcción del nido es similar a la del pito real aunque en el caso del pico picapinos este tiene capacidad para trabajar casi cualquier tipo de madera, incluso las más duras, lo que le permite seleccionar una gran variedad de hábitats. La puesta se compone de 4 a 6 huevos, incubados principalmente por la hembra, aunque durante la noche es relevada por el macho hasta los 12 – 16 días.

Su principal fuente de alimentación son larvas de insectos que busca excavando con el pico en la madera, pero en invierno la completan con materia vegetal como frutos secos. Los introduce en un hueco de la corteza de un árbol y va taladrando su cáscara para abrirlos. En las zonas donde hay coníferas recoge las piñas, las lleva a una rama y poco a poco va extrayendo las semillas o piñones para comerlos, después las deja caer al suelo formando un buen montón.

Su Estado de Conservación es de Preocupación Menor en la Lista Roja de la UICN de Especies Amenazadas. Puede verse amenazado por la tala de árboles y la eliminación de troncos muertos que les sirven de cobijo a la hora de anidar, los incendios, o por un cuidado inadecuado de los bosques en general.

Os dejamos con un capítulo de la serie «El hombre y la tierra» donde podréis ver algunas de las curiosidades que os hemos contado en esta y en anteriores entradas de Arquitectos del Sureste:

https://www.rtve.es/play/videos/el-hombre-y-la-tierra/hombre-tierra-fauna-iberica-pajaros-carpinteros-1/5676330/

Fuentes:

https://seo.org/ave/pico-picapinos/

https://hablemosdeaves.com/pico-picapinos

https://www.asturnatura.com/especie/dendrocopos-major.html

Arquitectos del Sureste: Pito real ibérico (Picus sharpei)

Anteriormente, ya os contamos algunas características comunes de los pájaros carpinteros y hoy vamos a centrarnos en uno inconfundible, el pito real ibérico. Es un pájaro carpintero de color verde con el obispillo amarillento y un píleo rojo muy llamativo cuya bigotera es roja con el borde negro en machos y negra en las hembras. En los jóvenes las marcas destacan menos, presentando el dorso moteado y las plumas con el borde oscuro. Considerada en el pasado subespecie del pito real europeo (Picus viridis), una serie de estudios genéticos concluyeron que, a pesar de su similar aspecto, eran una especie distinta. Además es la especie de carpintero más común en los alrededores de El Campillo.

Pito real captado con la cámara de fototrampeo en los alrededores del CEA El Campillo.

Vuelan a poca altura y de forma ondulante y de todos los pájaros carpinteros son los que más se posan en el suelo buscando hormigueros. También captura insectos en la corteza de árboles y extrae larvas xilófagas (pero solo cuando la madera está podrida ya que su pico no es tan fuerte como el de otras especies). Sin embargo, ¡su lengua puede medir más de 10 centímetros! Estos hábitos alimenticios hacen que sea más fácil escuchar su relincho característico que el tamborileo propio de otros miembros de su familia.

Fuente: Katrina van Grouw

Es el menos forestal de los carpinteros ibéricos, ocupando pequeños sotos fluviales, parques urbanos y zonas agrícolas con árboles aislados o en hileras. Utilizan árboles viejos o secos para construir el nido el cual tardan entre 15 y 30 días en construir. El nido tiene una entrada de unos 6 cm de diámetro que da acceso a un túnel que, a su vez, finaliza en una cámara donde ponen entre 5 y 7 huevos de color blanco que son incubados por ambos progenitores durante 19 días aproximadamente. Llegado el momento de abandonar el nido han de tener cuidado con algunos de sus depredadores como la gineta o el azor.

Nido en un chopo en la senda de la laguna de El Campillo.

Su Estado de Conservación es de Preocupación Menor en la Lista Roja de la UICN de Especies Amenazadas, sin embargo sus poblaciones se encuentran en descenso debido a la intensificación en los usos agrarios y forestales, así como la conversión de pastos en tierras de labor, al reducirse la población de hormigas. Por otro lado, la tala de setos arbolados, bosquetes aislados y sotos fluviales limita los posibles lugares de nidificación. Son poco resistentes al frío, por lo que se pueden provocar grandes mortandades durante algunos inviernos.

Fuentes:

https://www.objetivonaturaleza.com/pito-real-iberico/pito-real

Guía de las Aves de España. Península, Baleares y Canarias. Tercera edición: abril de 2016. Lynx Edicions.

BirdLife International (2021) Ficha de la especie: Picus sharpei http://datazone.birdlife.org/species/factsheet/iberian-green-woodpecker-picus-sharpei

https://www.miteco.gob.es/es/biodiversidad/temas/inventarios-nacionales/pito_real_tcm30-100123.pdf

https://elguadarramista.com/2016/05/21/pito-real-el-senor-de-los-bosques/

Arquitectos del Sureste: Pájaros carpintero

¿Vas paseando por El Campillo y escuchas algo parecido al relinchar de un caballo? ¿O un rápido golpeteo en la madera? ¡Son los pájaros carpinteros! Conocidos también como pitos, picos, picamaderos, picatroncos o torcecuellos, forman parte del orden de aves de los piciformes en dónde se incluyen más de 300 especies divididas en siete familias.

Todos ellos se caracterizan por tener unas adaptaciones evolutivas fascinantes. Presentan fuertes, largos y afilados picos para poder taladrar en la madera y lenguas largas, finas, puntiagudas y con pequeñas cerdas para extraer la comida. Además, sus pies son zigodáctilos, es decir, tienen cuatro dedos, dos hacia adelante y dos hacia atrás, esto les viene muy bien para agarrarse a los troncos y ramas de los árboles donde viven. A esto hay que sumarle su cola corta y cuadrada que les ayuda a conservar el equilibrio durante el golpeteo de las cortezas.

¿Cómo es posible que no se hagan daño? Su cuello es muy rígido por lo que no pueden rotar la cabeza casi 360° como el resto de las aves. Sin embargo, al golpear con fuerza les protege la columna y retienen el cerebro en total sincronización con el golpeteo, absorbiendo el impacto. También les ayuda el hecho de tener un cartílago esponjoso que absorbe cada golpe contra la madera, un músculo que separa la cavidad cerebral del pico y una serie de huesos hioides que se extienden por encima del cráneo y que se encuentran en una funda llena de líquido para poder apretarse o separarse.

Toda esta estructura también tiene la misión de contener su extraordinaria lengua que da toda una vuelta al cráneo, comenzando por los orificios nasales, pasa sobre los ojos, rodea el cerebro y baja hasta la boca, por donde sale, lo que no sucede en otras aves. A partir de la garganta, se bifurca rodeando los huesos de la columna vertebral.

En próximas entradas os hablaremos de las 3 especies que podemos encontrar en el Parque Regional del Sureste: Pito real ibérico (Picus sharpei), el Pico picapinos (Dendrocopos major) y Pico menor (Dendrocopos minor).