De entre las más de 120 especies de aves presentes en el Parque Regional del Sureste, una de las más llamativas por su tamaño, sus colores y su majestuosidad es, sin duda alguna, la garza imperial. Esta especie pertenece a la familia Ardeidae en la cual hay incluidas más de 70 especies. No solo otras especies de garzas (garza real, garza azulada,…) sino también sus parientes: garcetas, garcillas, martinetes y avetorillos. Todos ellos se caracterizan por ser aves zancudas de patas, picos y cuellos largos en relación a su cuerpo y por vivir cerca de núcleos de agua ya sea dulce o salada.
La garza imperial mide unos 70-90 cm de longitud y tiene una envergadura de 110-145 cm llegando a pesar hasta 1,2 kg. Sin casi dimorfismo sexual (la única diferencia es que las hembras son un poco más pequeñas) viste colores grises y púrpuras en su espalda, oscuros en el píleo de su cabeza de la que salen un par de plumas oscuras y largas, castaños con bandas blancas y negras en el cuello y vientre oscuro. Cazadora al acecho, aunque a veces lo hace de forma mas activa, se alimenta principalmente de peces que complementa con anfibios, insectos y micromamíferos. Aunque caza en solitario, nidifica en colonias en el carrizal poniendo entre 4 y 5 huevos color azul verdoso por puesta.
Las especies con las que puede confundirse en el Campillo son: la cigüeña y la garza real. Para diferenciarla de la primera, hay que fijarse en su cuello mientras vuela ya que, como el resto de ardeidas, vuela con el cuello encogido en forma de S. Para no confundirla con la segunda hay que fijarse en los colores ya que la garza imperial es más oscura que la garza real (y un poco más pequeña, aunque eso es más difícil de observar). Además, si vienes en invierno, a la que verás es a la garza real ya que la garza imperial es una especie estival, es decir, solo pasa con nosotros la primavera y el verano.
Se estima que en España hay una población de unas 2.000 parejas, viviendo más de la mitad de ellas en las marismas del Guadalquivir y en el delta del Ebro, de las que tan solo unas 26-28 en el Parque Regional del Sureste. Incluida en la categoría de “Preocupación menor” en el Libro Rojo de las Aves de España y en la “De interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, sus principales amenazas son: la alteración de su hábitat, las sequías y el uso indiscriminado de plaguicidas.
Bibliografía:
Guía de la Naturaleza en el Parque Regional del Sureste. Grupo NAUMANNI. 2005






















